Se ahogan dos turistas norteamericanos arrastrados por crecida de río

Una pareja de esposos que se encontraban disfrutando de un baño en el balneario de La Damajagua, municipio de Imbert, en Puerto Plata, se ahogaron al ser arrastrados por una crecida en uno de los charcos del referido lugar de recreación pública, informó la Policía destacada en aquella localidad.

Las víctimas son David y Jien Rosemberg, de 52 años de edad y quienes murieron a causa de asfixia por sumersión, de acuerdo al certificado del médico legista actuante en el caso.


Los cadáveres de los turistas norteamericanos fueron depositados en la morgue del hospital público Ricardo Limardo, de Puerto Plata, al norte de la República Dominicana.

De acuerdo a versiones de lugareños, los esposos estaban acompañados de sus dos hijos, Edward y Steven, de 19 y 16 años y estos trataron de sacarlos del charco donde se bañaban, pero la crecida era muy fuerte, por lo que no pudieron sacar a sus padres.

Ante la situación, los jóvenes se pusieron a salvos, viendo con impotencia cómo se ahogaban sus progenitores.

Los esposos estaban hospedados en el hotel Ocean Dream, de Cabarete, en Sosúa, y pretendían retornar a Estados Unidos este sábado, pero la suerte les hizo una mala jugada, y llegarán a su tierra natal, pero muertos.

En los últimos días se están produciendo precipitaciones en diferentes regiones del país, debido a la presencia de dos vaguadas sobre la República Dominicana.

Los 27 Charcos de la Damajagua

Los 27 charcos del salto de La Damajagua, monumento turístico de este municipio, han recibido la afluencia de una masiva visita de vacacionistas. La Damajagua y su entorno está dotada de una singular belleza que la hace atractiva al visitante nacional y extranjero porque para muchos residentes en la zona, la madre naturaleza pozo sus manos de manera prodigiosa en esa gran cantidad de charcos de agua dulce.

En periodos normales un equipo de hombres entrenados en la materia tiene a su cargo la seguridad de las personas que visitan a diario estos charcos, los cuales están siendo promocionados a nivel internacional y es de ahí que los turistas cuando llegan a República Dominicana exigen que los lleven a conocer los mismos.

Las personas que desean visitar los charcos de La Damajagua son dotadas en principio de chalecos salvavidas, zapatillas especiales, un casco protector y una capa que le cubre parte de su cuerpo debido a que el lugar es resbaladizo y por la altura de dicho salto cualquier puede sufrir un accidente.

Por lo regular los interesados en bañarse en los 27 charcos, los cuales en su totalidad nunca son cubiertos por los vacacionistas, deben caminar unos 500 metros de distancia.