"Después subió al monte, y llamó a sí a los que él quiso; y vinieron a él. Y estableció a doce, para que estuviesen con él, y para enviarlos a predicar, y que tuviesen autoridad para sanar enfermedades y para echar fuera demonios" (Mt 3.13-15)
"Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor;y comenzó a enseñarles muchas cosas. " (Mc 6.34)
Una experiencia personal.Mi experiencia personal.
No siguió un método, sencillamente dedicó parte de su vida, lo observé, aprendí, estudiamos la Biblia
1. SER más que hacer.Nuestro problema es que somos occidentales. ¡Y cada vez más!. Somos muy pragmáticos. Si yo diera una charla sobre el pastoreo, haría algo así: Estrategia pastoral, la entrevista pastoral, cómo formular preguntas, 5 actividades del pastoreo, dinámica de las relaciones, el liderazgo motivador. Pero eso no es lo que enseña la Biblia del pastoreo.
El pastoreo tiene más con ser que con hacer: con lo que tú eres que con lo que haces.
Tiene que ver con ser un modelo sincero. Vivir una fe sincera y mostrarla por el ejemplo y la palabra.
Un asesor que nos empujaba: organizaba, hacía asignaciones, si faltabas te llamaba, pero.... nunca llegamos a conocerle. El tipo era genial y todos lo queríamos, pero, sólo era un organizador, además era un misterio, no conocíamos de su vida nada.
Pastorear no es:-El capitán de un equipo de fútbol, motiva y lidera. Y aunque pastorear tiene que ver con motivar y liderar, es mucho más que eso. Este modelo de liderazgo no cuida a los más débiles, sino que se sirve de los fuertes para conseguir sus metas. Este tipo de liderazgo alimenta el ego y sólo piensa en sus objetivos, y no se da cuenta que el fin son las personas.
-Ser profesor o maestro. Aunque incluye la enseña el pastoreo es mucho más. Un profesor termina su clase y se marcha, el pastor tiene algo de profesor, pero también de padre. El profesor se olvida de sus alumnos hasta la próxima clase, el pastor los lleva en el corazón, igual que hacía Pablo quien muestra así su preocupación:
Gal 4.19 "Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en vosotros"...
Qué es el pastoreo.
Pensemos en un pastor al estilo clásico: ovejas y un tipo que va con ellas. El pastor oriental va delante de ellas (y las ovejas le siguen), se mueve entre ellas (no vive a parte de ellas), vive con ellas (comparte su vida), cuida y protege de los lobos, guía a las fuentes de agua y pasto, y fortalece a las más débiles.
Pastorear no es tarea únicamente del "pastor", sino de toda la iglesia. "Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros,a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo" Ef 4.11-12.
La idea es que aquellos con el don de pastor, tienen la responsabilidad de entrenar o capacitar a la iglesia en el pastoreo, para que así los santos (creyentes) sean capaces de llevar a cabo el ministerio. No es cosa de un solo hombre, sino de los creyentes.
Pastorear incluye enseñar, consolar, guiar, proteger, y guiar a la madurez. Pero es más que eso. El pastor es una persona que estaba perdida en la vida, sin rumbo, y un día Jesús se acercó a él, y usó a alguna/s persona/s para cuidarla. Dios mismo le consoló, guió y fortaleción, además Dios puso su amor en él para que pudiera cuidar de otros.
1 Ts 5.14 "También os rogamos, hermanos, que amonestéis a los ociosos, que alentéis a los de poco ánimo, que sostengáis a los débiles, que seáis pacientes para con todos.".
Pastorear es invertir tu vida en la de otras personas. Mirad el ejemplo de Jesús, El no montó un seminario, o una escuela. Pasó tres años y medio de su vida con 12 hombres. Compartió su vida con 12 hombres, y les cambió por medio de manifestar Quien era y su relación con Dios. Esto es importante, porque Felipe le pide a Jesús que les muestre a Dios, "Señor, muéstranos el Padre, y nos basta. Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, y no me has conocido, Felipe?" (Jn 14.8-9)
Os voy a poner un ejemplo de un tío con defectos, ignorante, orgulloso, torpe, despistado y miope que pastoreó a tres jóvenes:
-un hijo de creyentes, dos de la calle.
-no sabía mucho, así que pasaba tiempo con ellos, básicamente hacíamos dos cosas, correr, comer spaguettis, y de vez en cuando estudiar la Biblia.
-Hace como cuatro años retomé el contacto con uno de ellos, quería que predicara en su boda, me dijo lo importantes que fueron para él el tiempo que pasamos juntos, ¡pero si solo comíamos spaguettis y hacíamos footing!. Había algo más.
La persona es la prioridad. Las grandes discusiones de Jesús en la Biblia eran con personas religiosas que defendían un modelo religioso por encima de las personas. Una de las lecciones que Jesús les enseña es que un hombre vale más que una oveja (por aquello de rescatar del pozo en Sábado).
Un caso real. Conozco un pastor que tenía grandes responsabilidades, viajes, un ministerio de renombre... y un chico de su iglesia que se estaba muriendo y que no había visitado. Un amigo mío lo estuvo visitando, pero el pastor no lo visitaba. La esposa del pastor le dijo que tenía que visitarlo antes de que fuera tarde, a lo que él respondió: "ahora mismo tengo cosas más importantes que hacer".
Pastorear tiene que ver con llevar las cargas de otros. Tienes que estar dispuesto a sufrir, porque el camino del pastorado es un camino de sufrimiento. No el tuyo, sino el de sufrir el de otros. Llevar sus cargas, escuchar sus luchas, consolar y sentarse a sufrir con ellos.
El corazón de alguien que pastorea sufre con los que sufren. Si no eres capaz de sufrir con, no eres capaz de aliviar la carga de la otra persona. Tus palabras serán vacías.
Tengo una amiga viuda. Una mujer de Dios, cuando murió su marido muchos se le acercaron a consolarla, le dieron sermoncitos, y usaron textos de la Biblia como si fueran fórmulas mágicas. Hubo otros que no supieron qué decir, sino estar con ella y compartir su tormento. Estos fueron los que la ayudaron.
Si enfrentas una situación de crisis ten cuidado con las respuestas de manual. Puedes herir más que ayudar. Es más importante consolar. Una mujer a la que estaba testificando en un tren (creo) me preguntó que dónde estaba Dios cuando su hijo murió, lo único que le pude decir es "aquí", Dios está aquí y me ha enviado a mí para escucharla.
2 Co 11.27-29 " He pasado muchos trabajos y fatigas, y muchas veces me he quedado sin dormir; he sufrido hambre y sed, y muchas veces me he quedado en ayunas; he sufrido frío y desnudez. Y como si fuera poco, cada día pesa sobre mí la preocupación por todas las iglesias. ¿Cuando alguien se siente débil, no comparto yo su debilidad? ¿Y cuando a alguien se le hace tropezar, no ardo yo de indignación?".
La oración es vital en la obra de pastoreo: cuando hay amor y verdadera preocupación la oración es contínua en aquel que pastorea. Y conviene que se tome en serio orar a conciencia por sus hermanos, como Pablo hacía, continuamente.
Pastorear implica buscar la restauración del caído. Muchos cristianos nos complicamos la vida con cosas que estorban e impiden nuestra relación con Dios. Al pastorear vamos a tratar con esas situaciones de pecado. Y por lo tanto debes ser paciente en lugar de implacable. A Jesús le trajeron a una mujer sorprendida en el acto de adulterio. Su forma de restaurarla fue sorprendente, fué capaz de restaurar sin condenar, de señalar su pecado sin destruirla. Un legalista no restaura, apedrea, un cristiano restaura y ama con el objeto que la persona se aleje de aquello que es un estorbo en su relación con Dios.
Preparaos para escuchar confesiones de impureza sexual (y no salir corriendo).
Pastorear es hacer a Dios presente con tu vida en la vida de otros. Es dejar que el Dios que vive en tí pastoree y cuide a otros, que Dios que te consuela y fortalece, que te corrige y guía, haga lo mismo en otros.
Somos vasos de barro en los que Dios vive. Lo que nos hace especiales es Dios en nosotros. El pastoreo es como la obra del Tabernáculo: acercar la presencia de Dios a otras personas, acompañarlas en su viaje.
Pastorear tiene que ver con tu relación con Dios. Considerar el párrafo anterior. Pastorear es reflejar a Dios, Quien está presente en tí, pero ¿está Dios presente en tí?, ¿vive Dios en tí?. En realidad en tus fuerzas puedes hacer muy poco, enseñar algo.
¿Qué prioridad le das a tu relación con Dios?, ¿a conocer a Dios -leyendo la Biblia y libros cristianos?, ¿a pasar tiempo a solas con Él?.
El estudio es fundamental. Hasta ahora hemos hablado de la compasión, pero todo cristian debe ser un estudioso de la Biblia y a su vez alguien capaz de comunicar las enseñanzas de la Palabra de Dios.
¿Cómo saber si Dios me ha llamado a pastorear a otros?.
La respuesta a esta pregunta está en Ef 4. El papel de los pastores es enseñarnos a cuidar unos de otros, a pastorearnos.
Aunque todos somos llamados a pastorear, algunos de manera especial manifiestan el don y la carga. Algunas preguntas para reflexionar: ¿tienes compasión?, hacia los que están perdidos, hacia los cristianos que viven su vida arrastrándose en lugar de disfrutarla, ¿tienes carga y sientes que alguien tendría que hacer algo?, porque en ese caso si te haces esa pregunta tú eres la respuesta a esa oración, ¿te gusta compartir y enseñar acerca de Dios? (la manera de pastorear de Jesús hacia las multitudes era enseñarles).
No importa cuales sean tus limitaciones, comparte tu vida con otros.
Alguno se está preguntando: si esto es así, no valgo para pastorar a otros jóvenes, estoy lleno de fallos y debilidades, no siempre soy consecuente, ni obediente.
Ok, nadie ha pedido que seas perfecto, ni que finjas serlo. Lo que Dios pide es que lo que hayas recibido lo compartas. Pero sobre todo lo que Dios nos pide es que tengamos una relación viva y real con Él.
Dinámica de grupo:
Ejercicio 1. 1 Ts 5.14. En cada núcleo hay todo tipo de cristianos, igual que en el texto. Hay varios grupos en este texto, ¿quienes son?. ¿Cómo distingues a unos de otros? (a los débiles de los de poco ánimo, de los ociosos). ¿Cual debe ser la actitud y las acciones a seguir con cada uno de los grupos, piensa en acciones concretas, conversaciones pastorales y estrategias que le ayuden a identificar en qué condición está y cómo abandonarla.
Julio Martínez
www.estudios-biblicos.org
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